Modos del verbo
MODALIDAD: clasificación de las proposiciones según un criterio lógico con respecto al contenido del enunciado y a la actitud del hablante. La modalidad no se manifiesta solamente a través del modo verbal, sino también a través de adverbios (como “posiblemente”) u otras estructuras. La modalidad puede ser o epistémica (se tiene certeza de que algo ocurrió o no) o deóntica (se tiene dudas, pero también expresa obligación, etc.).
Emilio Ridruejo: “La modalidad epistémica, que se presenta vinculada a la noción de conocimiento y creencia (…), se define como la expresión del grado de compromiso que el hablante asume con respecto a la verdad de la proposición contenida en un enunciado”. (Orientada al hablante).
“La modalidad deóntica aporta, como la epistémica, una calificación de las condiciones en que se establece la verdad del predicado, que tampoco es simplemente aseverado o factual; pero a diferencia del anterior, supone una formulación de estas condiciones como pertenecientes a un sistema normativo en el que actúa bien el agente de la proposición a o directamente el hablante”. (Orientada al hablante y al oyente). Se utiliza para expresar mandatos, obligaciones y deseos.
Hay autores que plantean que la modalidad se gramaticalizó en los modos verbales. El modo se ha explicado en español a través de diferentes criterios. Actualmente, se cree que para explicar los modos, sobre todo el subjuntivo, deben utilizarse los tres criterios a la vez: semántico, sintáctico y pragmático. Desde la perspectiva semántica, se toma en cuenta la actitud del hablante con respecto a lo que enuncia; así el indicativo indicaría realidad y certeza, mientras que el subjuntivo sugeriría irrealidad e incerteza. Desde el punto de vista sintáctico, la elección del subjuntivo se va a explicar a través de la aparición de un elemento en la oración que lo induce en la oración subordinada: “Lamento que no vinieras”.
La postura de Bello es más bien de carácter sintáctico aunque está vinculada con lo semántico. Según él, el modo forma parte de la flexión del verbo y se define por la regencia de otro elemento:
sé que viene dudo que venga
sé que vendrá dudo que viniera
sé que vino dudo que haya venido
supe que vendría dudo que viniera
supe que venía dudo que viniera
Para Bello, el modo se define por RECCIÓN: influencia que ejerce determinado elemento (por ejemplo, los verbos “saber” y “dudar”) sobre una subordinada sustantiva. El verbo que rige sobre la subordinada puede estar explícito o no.
· INDICATIVO
· SUBJUNTIVO:
∙ Subjuntivo común: en oración subordinada con regente.
∙ (Subjuntivo) optativo: se utiliza en oraciones independientes para expresar deseos, órdenes y mandatos, i.e. un deseo positivo o negativo omitiendo el “deseo que”, que se puede reponer.
Dentro del subjuntivo optativo, Bello concibe la presencia de las formas imperativas (como canta, cantá y cantad que son imperativas desde el punto de vista morfológico). Estas (1) no pueden ser negadas, (2) no pueden subordinarse y (3) en ellas el clítico aparece pospuesto, al igual que en el infinitivo o gerundio.
· SUBJUNTIVO HIPOTÉTICO: es el que se conforma con el subjuntivo en futuro, tanto en su forma simple como en su forma compuesta. Siempre aparece en oraciones condicionales.
REGENTE: elemento que condiciona la aparición del modo subjuntivo:
Deseo que vengas.
Estoy deseoso de que vengas.
Tengo el deseo de que vengas.
Las oraciones subordinadas sustantivas pueden cumplir la función de sujeto, O.D., o término de preposición. En las oraciones subordinadas sustantivas, va a aparecer el subjuntivo cuando el regente es:
I. PREDICADO DE DUDA O INCERTIDUMBRE
1. Verbos que significan duda o incertidumbre:
a. Dudo que gane la carrera.
La forma “gane” aparece en forma subjuntiva, ya que aparece en una oración subordinada sustantiva en función de O.D. de la forma “dudo”, y los verbos que expresan duda exigen u obligan la presencia del subjuntivo. No se puede decir *“Dudo que ganó”.
b. Está por verse que gane esa carrera.
El subjuntivo es obligatorio en la oración subordinada sustantiva que funciona como S.L. de la estructura “está por verse” (que es el predicado verbal o predicación léxica).
2. Predicado nominal: adjetivo (atributo)/ sustantivo
Es dudoso que gane la carrera.
II. PREDICADOS VOLITIVOS. Para estos predicados, que expresan deseo, se aplica la misma subdivisión:
1. Verbos que expresan deseo:
Quiero que gane la carrera.
La oración subordinada obligatoriamente tiene subjuntivo exigido por “querer” en la oración subordinante.
2. Adjetivos volitivos o de necesidad:
Es necesario que gane esa carrera.
III. PREDICADOS RELACIONADOS CON EL MANDATO, LA PETICIÓN.
Te ordeno que vengas.
Te prohíbo que vengas.
Le dio la orden de que viniera.
“De que viniera” funciona como adyacente adjetivo del sustantivo “orden”; “de”, como transpositor; y “que viniera”, como término de preposición y es una subordinada sustantiva transpuesta a adjetivo por la preposición “de”.
IV. PREDICADOS DE VALORACIÓN (INTELECTUAL, EMOCIONAL). Constituyen juicios que pueden hacerse sobre ciertos hechos.
Lamento que no vengas.
El subjuntivo sirve para afirmar un evento sabido; según Bello es una presuposición, i.e. la información nueva es el juicio que hago, pero la subordinada se da como algo sabido.
Lamento que no hayas venido.
Es admirable que haya venido.
Es lamentable que no haya venido.
Casos limítrofes, ya que para algunos autores son subordinadas sustantivas, mientras que para otros adverbiales:
Lo atacó sin que se diera cuenta.
(1) Antes de que/ (2) Antes de que viniera todo estaba preparado.
Se discute si “antes de que” y “sin que” son locuciones o no. Si se considera que (1) no, entonces la preposición tiene como término una oración subordinada sustantiva que rige la aparición del subjuntivo. Si se entiende que (2) sí, se trataría de una subordinada adverbial encabezada por la locución subordinante.
ADVERBIALES
a. propias (conmutables por un adverbio).
b. impropias (no conmutables por un adverbio, como las concesivas, condicionales, causales…)
ORACIONES SUBORDINADAS ADVERBIALES QUE OBLIGATORIAMENTE TIENEN EL SUBJUNTIVO
Me observó como si fuera a hablarme.
Es distinto que el caso anterior porque no se puede discutir si se trata de una locución o no, sino que lo es. De hecho, la locución conjuntiva “como si” conjuga el valor hipotético de “si” y el valor comparativo de “como”. La construcción, globalmente, presenta un valor modal. El subjuntivo es obligatorio en las oraciones encabezadas por “como si”.
Cuando vengas, estaré trabajando.
Me dijo que cuando viniera, estaría trabajando.
Cuando vino, estaba trabajando.
Las dos primeras son construcciones prospectivas. En estos casos la aparición del subjuntivo se da por la combinación de dos elementos: (1) se encuentra en una subordinada adverbial encabezada por “cuando”; (2) en la oración principal encontramos algún elemento prospectivo que indique posterioridad o futuridad (como el futuro o el condicional).
En las condicionales de períodos hipotéticos irreales o contrafácticas, el subjuntivo, según Bello, está relacionado con una negación implícita:
Si supiera la respuesta, te la daría (pero no la sé).
Si hubiese sabido la respuesta, te la habría dado (pero no la supe).
RELATIVAS
En las oraciones relativas lo más común es la posibilidad de que puedan alternar indicativo y subjuntivo:
Busco un libro que tiene ilustraciones.
Busco un libro que tenga ilustraciones.
Las oraciones subordinadas adjetivas o de relativo siempre son parte de un sintagma nominal. Las que pueden alternar entre modo indicativo y subjuntivo son las restrictivas o especificativas. Cuando se usa el subjuntivo, la lectura que se hace del sintagma nominal es inespecífica, mientras que cuando aparece indicativo, la interpretación que se hace de este es específica.
Por su parte, la alternancia involucra diferencias de significado y solo pude ocurrir en determinados contextos con ciertos verbos: buscar, necesitar, etc.